A veces me gustaría tener Alzheimer, pero no un Alzheimer típico sino un Alzheimer selectivo en los que se pudiera olvidar todo lo malo y recordar solo las cosas buenas. Los malos sentimientos solo nos hacen daño a nosotros mismos y nos hacen perder trenes valiosos como el tren que nos devuelve la vida. Por ello, en esta vida es necesario olvidar para poder avanzar, para poder experimentar, pero aplicando las conclusiones que nos da la experiencia para no cometer el mismo error una y otra vez.
Muchas hay que “vaciarse” para podernos llenar de nuevo de nuevas sensaciones. Y es harto complejo porque olvidarse de aquello que te ha hecho daño es difícil, siempre hay algo o alguien que te lo recuerda. Pero llegara un día en que tengas que vaciarte porque tu alma te lo pide, porque no puede estar el resto de su vida triste y con odio, ella que se alimenta de sueños y buenos sentimientos. Tu alma siempre te dirá cuando es el momento preciso para vaciarse.
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